La rehabilitación de las mandíbulas atrofiadas representa un reto importante en la implantología oral. Se han descrito técnicas de injerto de aumento óseo vertical o de transposición del nervio dental, pero con importantes riesgos postoperatorios: reabsorción ósea, dolores intensos o pérdida de sensibilidad(1).
Por otra parte, numerosos estudios llevados a cabo durante 8 años demuestran que se pueden obtener resultados clínicos igualmente buenos, incluso mejores, con implantes más largos colocados en el hueso aumentado(2).
El implante tissue level revisado
El twinKon presenta un hombro redondeado al nivel del cual se encuentra el límite liso-rugoso del implante. Este hombro está rematado por un cuello cóncavo liso que está en contacto con el tejido conjuntivo. El objetivo del cuello cóncavo es recrear una junta mucosa de primera línea que haga las veces de barrera natural.
Todas las manipulaciones protésicas posteriores se desplazan por encima de este límite, reduciendo así el riesgo de contaminación iatrogénica en beneficio de la conservación del capital óseo residual.
Cuello cóncavo y reorganización tisular
En un estudio realizado en beagles, la doctora Caroline Bolle muestra tras 12 semanas una reorganización del tejido conjuntivo rica en fibroblastos de colágeno anclados al hueso y que convergen de manera horizontal en el implante.
En el espacio de cicatrización definido por la concavidad del cuello transmucoso se observa una organización circular y horizontal de las fibras de colágenos sobre un espesor de 500 mm (desde el cuello hacia la periferia).
A pequeña escala, las secciones verticales revelaron una reorganización circunferencial densa de estas fibras de colágeno.
Bolle– Early Periimplant Tissue Healing on 1-Piece Implants with a Concave Transmucosal Design: A Histomorphometric Study in dogs (2015)